Autor: José Rivero

Comentario:

Oremus. El lema que distingue a este régimen político-social que padecemos es: “La única persona que importa soy yo". Este es el típico mensaje detrás de un culto a la personalidad que distingue al presidente López Obrador y este culto tiene como propósito el reforzar su posición política de líder absoluto y mandamás de su proyecto. La emergencia de una personalidad autocrática como la de AMLO no es un accidente de la historia, sino que es la emergencia de un fenómeno sistemático que podemos y debemos estudiar. Los líderes autocráticos han sido descritos en la historia como líderes ‘personalistas’. Patrick Geddes sociólogo y polímata francés afirmaba que el progreso social y las formas espaciales de un régimen están relacionados. Por tanto, al cambiar estas formas espaciales podemos cambiar la total estructura social vigente. El estudio y descubrimiento de nuestras raíces históricas explica el porqué de las cosas del presente. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Francisco Belmares Tapia

Comentario:

Por 45 años, trabajé en diversas corporaciones de tránsito; entre ellas la de Monterrey, en la que estuve 26 años; de los cuales, dos, en 1998 y 1999 fui secretario de Vialidad. En los años 2000 y 2001, fui director de la escuela ICET 2, del gobierno del estado de N.L. donde se capacita a conductores de servicio público de pasaje y/o carga. Hoy, leí en Monitor Político, lo que El Norte y Francisco Tijerina Elguézabal opinan acerca de la vialidad. Se menciona que El Norte escribió: Dicen multar a tráileres, pero caos sigue: Municipios metropolitanos de NL aseguran que aplican miles de multas contra los tráileres, pero camiones siguen generando caos y accidentes. Francisco Tijerina Elguézabal, opina: La idea de restringir a la noche el paso de unidades de carga (¿?????) por nuestras avenidas es algo que ya en muchas ocasiones habíamos propuesto sin encontrar eco. La medida de permitir que se mezclen con el resto del tráfico lo único que consigue es extender las horas pico y poner en riesgo a quienes circulan a esas horas. Es buena la idea de sólo permitirles utilizar nuestras calles durante la noche. Considero prudente analizar estadísticas que indiquen qué porcentaje del total de accidentes viales ocurridos durante el día, son causados por los conductores de “trailers”. Pregunto a Francisco ¿si al mencionar “unidades de carga” está incluyendo a las camionetas de dos ejes, ya que también son vehículos de carga? ¿a quién haya escrito en El Norte y a Francisco, pregunto: 1. ¿saben la cantidad de vehículos de 3 o más ejes entran diariamente sin límite de horarios a la zona metropolitana de Monterrey? 2. ¿En qué tramos de las carreteras federales que conectan con dicha zona van a estacionarse o esperarse durante el día dichos vehículos? 3. ¿Saben si en dichas carreteras federales hay tramos con área de estacionamiento?  4. ¿Saben si durante la noche, están abiertos todos los lugares de entrega de carga en la zona metropolitana? 5 ¿Saben que la mayoría de materias primas para la fabricación o elaboración de productos y productos terminados se transportan en tráileres? Considero que, si se aplican las restricciones mencionadas, va a crear caos en la productividad de empresas y comercios de N.L. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: José Enrique Carrillo

Comentario:

Buenos días amigos de Monitor Político; no nos distraigamos; el debate formal es con fecha y hora; es interesante para escuchar propuestas formales y profesionales de políticas públicas; y ¿qué pasó? No hubo capacidad de los candidatos; en conclusión, cómo decía el cómico: no hay, no hay; sin embargo, para los que desean un debate de posturas políticas, la señora Xóchilt declara en forma de rutina, sin conocimiento, todo está mal de este sexenio; y la señora Claudia dice que no regresemos al pasado, indicando que todo está bien; ese es el punto de debate y divertido de las dos posturas; ambas tienen desde mentiras hasta pecados de corrupción en su declaración, muy obvias para todos; y Máynez suspirando por el voto; en mi encuesta de jóvenes sigue igual: no irán a votar; y unas amistades me dicen que no irán; los respeto, porque el voto es libertad democrática; esto quiere decir, que usarán, que los partidos usarán los recursos ilegales; de lo que ya son expertos algunos miembros de partidos políticos y hasta dan clase de voto ilegal, y desde luego, legal; gracias por el espacio. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ariel Zapata

Comentario:

Cuando se trata de influir socialmente en dirección predeterminada por algunos intereses constituidos, aun sin la certeza adecuada de algunas de las formas de comunicar, donde se habla de temores a futuro y que se atribuyen a prerrogativas varias, mencionando “dicen los expertos que”, sin mencionarlos, o “que ciertas organizaciones opinan” o que “tal institución menciona”, etc. Como la manera de canalizar tendencias a futuro con afirmaciones o juicios sin sustentar en la razón y que, al comentarlo, se volatiliza la responsabilidad de lo dicho, aunque ya se marcó la influencia en la sociedad. Para el ciudadano común, que toma decisiones bajo esta tutela de juicios y afirmaciones a futuro no sustentados, se le vendrá abajo toda acción ejecutada en ese sentido. De aquí la importancia ética de tener cuidado de no hacer este tipo de enunciados que lo que provocan al final de cuentas, son pérdidas de recursos, al haber navegado en aquello que se creía cierto en lo expresado inicialmente y que no pegó lamentablemente. Así que de esta manera la responsabilidad ética de los hechos enunciados, queda difusa y es como no avanzamos, como quisiéramos. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

“Con Ojos y Oídos de Niño... de 82 Años, Clamando en el Desierto”. En Mi Casa Paterno-Materna, No Dejábamos Sobras de la Comida. A menudo he visto en la televisión a miembros del famoso “Exilio Español en México”, narrar las estrecheces y carencias que vivieron como “Transterrados”, al llegar a nuestra amada Patria Mexicana. Una que me llama particularmente la atención, es la mención repetida, que ellos hacen, como si fueran mártires del Primer Milenio, de que no dejaban sobras de comida en sus platos postprandiales. A diferencia de sus compañeritos escolares mexicanos, que, según ellos, habían sido educados a no consumir el total de las raciones alimenticias servidas, para no dar señales de indigencia en casas ajenas. Quiero hacer algunos señalamientos al respecto, por todo lo que implican actualmente en nuestra vida y sociedad. En mi casa nunca, pero nunca, nos permitieron dejar sobras en los platos de la comida que nos servían. Esto, por dos motivos, el primero, porque nuestra abuela materna nos inculcó la idea de que la comida, toda, era sagrada pues nos la proporcionaba el Altísimo, según San Pablo, (1 Corintios, X: 25). y desperdiciarla era un grave pecado que no nos permitiría cometer. El segundo, la misma abuela, que era una viuda joven y sobreviviente de la Revolución Mexicana de 1910, por lo cual vivió y sufrió, como joven madre temprana, enormes penurias, privaciones alimenticias y peligros de todo tipo. Incluidas las amenazas de violación y muerte violenta, como su marido, mi abuelo materno. Además, mis padres, ambos, también vivieron una infancia y adolescencia, llenas de todos esos temores, amenazas y exagerados eventos violentos de la vida nacional. Con solo esos dos ejemplos, pueden imaginarse que, aunque los valoro y respeto, no me impresionan mucho las vicisitudes de los extranjeros que llegaron a un país en el cual, se hablaba su mismo idioma y se practicaba la misma religión y que en esos momentos, nuestra Patria vivía bajo estandartes ideológicos en pugna, similares a los del país que los expulsó. (Filipenses: IV, 12). Y que les proporcionó generosamente trabajo, comida y una vida segura, sin los sobresaltos de su tierra natal. Por otro lado, ya lo he mencionado varias veces también, es lo que yo he llamado, el HOLOCAUSTO HORMIGA, sufrido por cientos de miles de nuestra gente, para compararlo con el holocausto de las décadas de los 30 y 40 en Europa. Nuestros paisanos siempre, y ahora los miles de migrantes, transterrados desde las más remotas naciones del orbe, viven diariamente, en grupos, en familia o individualmente, este tipo de holocausto, persecución y a veces prisión y muerte, junto con sus pequeños hijos. Esto, en un país cuyo idioma no hablan, ni entienden, religiones y costumbres totalmente ajenas a las suyas y no se diga, la alimentación en las diferentes formas del mercado, que desconocen por completo. Con el agravante de que no reciben ayuda oficial alguna, como los que llegaron a nuestras tierras. Los mexicanos que nos quedamos en México, ¿Deberíamos sentir algún tipo de admiración por holocaustos pasados, condenados ya por la historia y castigados por las naciones involucradas e ignorar el que se da todos los días en nuestras fronteras? Yo digo que no, son demasiados los seres humanos sacrificados por las decisiones de los orates, locos de capirote, como Trump, Abott, AMLO, Maduro y Ortega, que se sienten dueños de vidas, señores de horca y cuchillo que rigen las vidas y destinos de millones de seres humanos. Falta otro holocausto, el llevado a cabo durante siglos contra los pueblos originales de todo el Continente Americano desde Alaska hasta la Patagonia, por las diferentes potencias invasoras europeas. Que todavía en el Siglo XIX y aún en el XX, continuaron masacrando a los pocos sobrevivientes de aquellos herederos de la tierra y las minorías transterradas por motivos económicos de su solo interés. Aun así, digo orgulloso, ¡Viva el mestizaje! Muchas noches me despierto cuando en mis sueños, revivo y recuerdo mis andanzas como indocumentado por tierras gringas. Me veo caminando con mi hermano gemelo a los 21 años, por carreteras, puentes y vías de ferrocarril llenas de nieve, hielo y torrenciales lluvias. Sin ropa de abrigo, hablando poco inglés y con solo 10 dólares en la bolsa. Es cuando me convierto en migrante y me dan ganas de gritarle a nuestros infames políticos, ¡Hagan algo, por ellos, sus mujeres y sus niños! Déjense de pejendejadas. Dizque persiguiendo corruptos, jugando golf los domingos, bailando con unos tenis Bofos-Bofos naranja o emborrachándose en un estadio. Bola de políticos idiotas, ojalá que se les pudra el remolino y les salgan verrugas “ahí” mesmo. Nota bene: Xóchitl, quiero que sepas que llegué a los 82 años, y no pude comprarme ni una casa de interés social, ¡Ni con dos postgrados! Tomen nota polacos; “Sé vivir en pobreza, y sé vivir en prosperidad; en todo y por todo he aprendido el secreto tanto de estar saciado como de tener hambre, de tener abundancia como de sufrir necesidad.” (Filipenses IV:12). ¿Podrán decir lo mismo nuestros avorazados políticos? Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.